martes, 6 de julio de 2010

Sudamérica: relieves paleozoicos

La característica que destaca a las principales serranías paleozoicas de Sudamérica es que las mayores (y contiguas a la orogenia andina) sufrieron en estos últimos sesenta millones de años una gran sobreelevación: por ejemplo los nevados de Famatina, en La Rioja, que superan los 6400 mts. de altura (foto superior).

Otra de las principales es la sierra Nevada de Santa Marta, en el N colombiano (estados de Magdalena, del César y de La Guajira). Con sus mayores alturas en torno a los 5.775 mts., se trata de las montañas más altas del mundo en áreas costeras (las cimas se hallan a unos 42 km de la costa).

Las diferencias de altitud marcan cambios notables en el bioma a distancias ínfimas, pasando de bosques y selvas en los pisos inferiores a nieves eternas a más de 5.000 mts. de altura.

Sudamérica: macizos precámbricos

















Los relieves más antiguos de Sudamérica surgieron en el precámbrico, hace unos 500 millones de años. Son macizos sobre los cuales se fueron forjando gran parte de las estructuras geológicas que forman el subcontinente tal como lo conocemos ahora, y que en ciertas regiones sigue apareciendo en la superficie: tal es el caso de las mesetas que forman el macizo de Guayania en el N (entre Venezuela, el extremo N de Brasil, Guyana y Surinam), la meseta de Brasilia en el E (abarca la mayor parte de Brasil, el E de Paraguay, el NE de Argentina, y Uruguay), y la de Patagonia en el S (centro y E de Río Negro, Neuquén, Chubut y Santa Cruz, centro y N de Tierra del Fuego). Las fotos corresponden al Salto del Ángel -con casi 1000 mts. de caída es la mayor del mundo- en Venezuela; a la ciudad de Río de Janeiro en la bahía de Guanabara, donde se notan los morros (cerros junto al mar) -en Brasil-; y a los acantilados costeros (en Monte León) y al valle del río Gallegos, encajonado por paredes rocosas -dos típicas postales de la meseta patagónica, en ambos casos de Santa Cruz-.